México. 12/diciembre/2025.
El presupuesto del Instituto Nacional Electoral (INE) para 2026 volvió a colocarse en el centro del debate político nacional, luego de que la Cámara de Diputados ratificara un ajuste a los recursos solicitados por el organismo electoral, decisión que fue respaldada posteriormente por el Senado de la República.

El recorte ha generado críticas por parte de partidos de oposición, principalmente del PAN, quienes advirtieron que la reducción presupuestal podría afectar la capacidad operativa del INE para organizar los procesos electorales previstos para 2026, considerados entre los más complejos por su alcance territorial y logístico.
De acuerdo con información oficial, el INE había solicitado recursos adicionales para fortalecer áreas clave como infraestructura tecnológica, capacitación de personal y seguridad de datos electorales. Sin embargo, el bloque mayoritario en el Congreso argumentó que la decisión responde a una política de austeridad y control del gasto público, sin que ello implique un riesgo directo para la organización de las elecciones.
Desde el Senado se reiteró que no habrá ampliaciones presupuestales extraordinarias, subrayando que el instituto deberá ajustar su planeación financiera a los recursos aprobados. Esta postura ha intensificado el debate sobre la autonomía del INE y el equilibrio entre disciplina fiscal y garantía de procesos electorales confiables.
El tema continuará generando discusión en los próximos meses, conforme se acerque el arranque formal de la planeación electoral rumbo a 2026 y el INE defina cómo reorganizará sus prioridades operativas ante el escenario presupuestal aprobado.
